"ESPAÑA, PAÍS DE PIRATAS INFORMÁTICOS"

 

¿Es únicamente España un país de piratas? Parece ser que el índice de piratería a nivel mundial se sitúa en el 36%, lo que supone unas pérdidas de 2,2 billones de pesetas. Estados Unidos es el país que encabeza la lista de los países con mayores pérdidas por piratería informática seguido por Japón, Reino Unido, Alemania, China, Francia, Italia, Brasil y Holanda, las pérdidas en estos países ascienden a más de un billón, atención con b, de pesetas (parece entonces que no los más desarrollados son los más respetuosos con la propiedad intelectual).

En Europa la piratería supuso unas pérdidas de 667.809 de pesetas en el año 1999, cifra bastante considerable, encabezando la "lista de piratas" Reino Unido, Alemania y Francia. Parece pues, que nuestros vecinos europeos también se dedican al pirateo, aunque son nuestro país y Grecia los que encabezan esta lista. En España en índice de piratería en el año 1999 se situó en el 53%, lo que significa que una de cada tres empresas utiliza copias ilegales, ¿qué supone esto? Fundamentalmente la imposibilidad de crear alrededor de 44.000 puestos de trabajo, y es que la piratería es uno de los principales obstáculos para el crecimiento del sector.

Para luchar contra esta práctica que parece estar de moda surge la Business Software Alliance (BSA), una asociación que actúa legalmente contra la piratería informática en 65 países de Europa, Africa, Asia, Norteamérica y Latinoamérica. Está integrada por las principales compañías que ofrecen programas de ordenador y servicios en el sector informático. En España los miembros de la BSA incluyen Adobe, Apple, Autdesk, Corel, Microsoft y Panda Software entre otros.

La cruzada contra la piratería informática no sólo la lleva a cabo la BSA sino que también se están tomando iniciativas desde los gobiernos tanto a nivel nacional como desde el Parlamento Europeo, el cual ha aprobado un informe solicitando acciones urgentes para defender los derechos de propiedad intelectual en la Unión Europea. Sin duda es esencial el compromiso por parte de todos los gobiernos en la lucha contra la piratería, un incremento de las multas, mejores procedimientos policiales y más rápidos procesos judiciales para asegurar un continuo crecimiento de la industria del software porque ¿no es importantísima la protección de los derechos de autor?, ¿qué está pasando cuando además los propios empresarios que piratean programas reconocen que se trata de un delito igual o más grave que delitos tan comunes como el fraude a Hacienda, a la Seguridad Social o al fraude en el I.V.A?, ¿qué opinarían ellos si les falsificaran los productos que fabrican? Sin duda es necesaria una mayor concienciación, pero como esto parece que ya existe, sería conveniente incrementar las multas.

Una alternativa por la que ha optado la BSA, sin duda ante la falta de conciencia hacia este problema, es la puesta en marcha de un programa de recompensas económicas (parece triste que se tenga que recurrir a este tipo de soluciones ante la pericia de jóvenes piratas expertos en pirateo que navegan en Internet y buscan una forma rápida de ganar dinero) por el que se gratificará hasta con 500.000 pesetas a aquellas personas cuya información genere acciones legales satisfactorias contra empresas sospechosas de utilizar o comercializar programas de ordenador sin licencia.

El tema es realmente preocupante cuando el 45% de los empresarios españoles admiten la existencia de prácticas irregulares en el entorno empresarial equiparando el uso ilegal de los programas de ordenador a fraudes como los anteriormente mencionados, fraude a Hacienda, a la Seguridad Social y al I.V.A. Lo que más llama la atención es que la copia de programas de ordenador ha dejado de ser percibido como algo banal, suponiendo una grave actividad ilegal sin justificación alguna en la que los empresarios incurren de forma absolutamente consciente.

Ante este hecho cabe la siguiente pregunta ¿por qué los empresarios siguen pirateando programas informáticos si parece que son plenamente conscientes de la ilegalidad de esta práctica? Fundamentalmente por razones económicas debido tanto al elevado precio de los programas (aunque el precio de los programas en nuestro país es similar al de los programas en el resto de Europa) como a una política de ahorro de costes. Sin embargo la costumbre extendida de piratear programas en vez de adquirirlos de forma legal es otra de las razones que llevan a los empresarios a emplear software ilegal.

A pesar de las razones fundamentalmente económicas que alegan los empresarios para justificar sus actuaciones existen importantes ventajas que éstos deberían tener en cuenta de cara a la utilización de un software legal como son la garantía, la fiabilidad y el soporte técnico. El empleo de aplicaciones legales facilita la posibilidad de disponer de una mejor información, la obtención de manuales de uso y la actualización de programas.

Ante estas ventajas me pregunto yo ¿realmente merece la pena el empleo de programas piratas? Pues parece ser que sí, como casi siempre, el tema económico prima sobre lo demás en el mundo empresarial. Sin embargo para ser justos debo decir que la piratería informática en nuestros país ha disminuido de un 57% a un 53%. A ello han contribuido distintas medidas adoptadas como la existencia de una Ley de Protección de Programas de Ordenador (aprobada a finales de 1993), la imposición de importantes sanciones económicas, registros sorpresa en empresas sospechosas de emplear software ilegal, campañas de los diferentes medios de comunicación, etc.

Parece, por tanto, que los empresarios españoles tienen conocimiento de la Ley de Protección Jurídica de los Programas de Ordenador y de las consecuencias de su infracción pero parece que el ahorro de costes prima sobre una posible sanción legal. Sin embargo ¿es esta una practica solamente empleada por empresarios españoles? Probablemente no, aunque sin duda es necesaria una mayor concienciación en todo lo relativo la protección de la propiedad intelectual.

Talia Besga Basterra  (www.leydigital.com)
Licenciada en Derecho y Especialista en Nuevas Tecnologias